Cada especie regula la temperatura de forma diferente y, sobre todo, distinta a los humanos. Por eso, lo que a nosotros nos puede parecer una temperatura aceptable, para ellos puede ser excesivo. Cuidar a nuestros animales en verano es más importante que en cualquier época del año, para no llevarnos un susto. Repasamos algunos consejos en función del tipo de mascota que tengas. 

Perros y gatos

Los perros y los gatos son los más afectados por el calor, pues se trata de dos especies que regulan muy mal la temperatura. Por eso, debemos ayudarles con algunos cuidados: 

- La alimentación: los perros y gatos deben reducir su ingesta de alimentos en verano, para no tener digestiones pesadas. Además, es recomendable que coman cuando hace menos calor, por ejemplo, por la mañana temprano y por la noche. También, puedes incluir ciertos cambios como aumentar la dosis de comida húmeda o comprar helados para perros y gatos. Por supuesto, asegúrate de que siempre tengan agua fresca. 

- El pelo: no le cortes el pelo a tu perro en verano, pues lejos de lo que se suele creer, el pelo les ayuda a sudar y bajar su temperatura. Lo que sí tienes que hacer, tanto para gatos como para perros, es cepillarlos más a menudo para eliminar el pelo muerto. 

- Protegerlos del sol: ¿sabías que existen cremas con FPS para el sol para perros y gatos? Están especialmente recomendadas para animales de pelo blanco y puedes aplicarlas en su pelaje y en la zona del rostro, sobre todo en la nariz. Por otro, ten cuidado con que no se quemen las almohadillas. Para saber si pueden andar sin peligro, coloca tu mano en el suelo. Si puedes mantenerla 30 segundos, es seguro para ellos.  

Además de todo esto, jamás se les deja “solo un ratito” en el coche o en el maletero en un día caluroso. Unos pocos minutos pueden ser suficientes para que les dé un golpe de calor.  

Roedores

Hay muchas clases de roedores y no todos necesitan los mismos cuidados, aunque hay una serie de pautas comunes: 

- Colocar la jaula en un lugar fresco: si tienes a tu jerbo, conejo, ratón, hámster o cobaya en una jaula, asegúrate de buscarle un sitio fresco donde no les dé el sol más de unos minutos al día. Por otro lado, si decides sacarlo por la casa, la terraza o el jardín, recuerda que no puede pasar demasiado tiempo sin sombra. 

- Agua fría y buena alimentación: lo más importante para las mascotas en verano es el acceso a comida húmeda y agua fresca. Asegúrate de que las encuentren en su jaula.  

- Limpieza más exhaustiva: limpia con más detalle su jaula, pues las bacterias afloran en verano. 

Aves

Las aves son unas mascotas que en verano no necesitan cuidados demasiado especiales, pues regulan por sí mismas, incluso mejor que nosotros, su temperatura. Eso sí, asegúrate de que tienen siempre agua fresca cerca. 

Por otro lado, dado que al final de la temporada estival las aves mudan las plumas, tienen un gasto de energía extra. Por eso, quizá deberías ofrecerles más alimento y sustituir semillas por fruta. 

El único problema con estas mascotas durante los meses de calor es la higiene de la jaula, que tendrás que limpiarla más a menudo para evitar comida en mal estado y agua con posibles bacterias.  

Si vives en una zona extremadamente calurosa, ten siempre la pecera en un lugar fresco, cámbiala más a menudo y asegúrate de que la temperatura del agua es la que necesitan tus peces según su especie. Si el agua se calienta en exceso, puede suponer un riesgo para ellos. 

Este es el único cuidado que necesitas tener con tus peces en los meses estivales. 

Las mascotas que en verano necesitan más cuidados son los perros y los gatos por su mala regulación de la temperatura. No obstante, todos te agradecerán más horas a la sombra y una buena combinación de agua fría y comida húmeda.  

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