La primera semana de julio, el Grupo AXA a nivel mundial celebra la semana de la Responsabilidad Corporativa (#AXACRweek), unos días en los que los empleados de la compañía dan lo mejor de sí mismos para la sociedad. En España se han dedicado más de 3.400 horas de voluntariado con más de 200 personas implicadas y con el Camino de Santiago como gran acción social. Pilar Pérez, coordinadora de AXA de Todo Corazón, la asociación de voluntariado corporativo de la compañía, nos cuenta en su diario personal cómo fue esta gran aventura solidaria junto a las asociaciones FDI (que nos ayudaba a organizarlo), Ademo y Rodando de hacer el Camino de Santiago.

DÍA 1

¡Por fin llegó el día! Después de días de dudas e incertidumbre nos reunimos en el exterior del Bernabéu. Maletas, dudas, camisetas... todos a bordo rumbo a conocer a nuestros compañeros de viaje. Al bajar nos encontramos decenas de caras expectantes de familiares y beneficiarios de la asociación Ademo. Besos y tímidos saludos, y las parejas de voluntarios y sus compañeros de viaje empiezan a juntarse.

Nos encontramos a Cristina, beneficiaria, que nos enseña sus uñas con brillantina; Houssain, que pide enseguida reguetón en el autobús, o Sonia, una chica de 21 años que al principio no quiere sentarse con Lola y Laura (voluntarias de AXA) pero que después, cuando hacemos la primera parada, no quiere bajar sin ellas. Y nos echamos a la carretera… ¡cuatro horas más y llegamos a León!

Comemos rápido y, con cierta reticencia por parte de los más tímidos del grupo, hacemos unos juegos para conocernos mejor: concurso de “disfraces”, juego del espejo…pero el que realmente rompe el hielo es el juego de hacer el abrazo más multitudinario.

Después comenzamos a caminar los 6 kilómetros que nos esperan hasta el fin de nuestra etapa, en el pueblo de Chozas de Arriba. En la caminata empiezan las conversaciones y risas. Algunos quieren ir andando “sin agobios”, y otras se niegan a dejar su mochila de ponys en la furgoneta “escoba” (aunque pese como un armario). Al final del recorrido se nos olvidan las diferencias, y es que no hay nada como compartir tiempo para conectar con las personas.

A la vuelta en bus nos esperan más anécdotas, ya que sin querer, al pasar por un pueblo, el autobús se lleva consigo los banderines de las fiestas, y todos se ponen a mirarlas como si lo más normal fuera llevar banderillas colgando del autobús. Como bien nos dice Pablo, beneficiario de Ademo, “lo hemos pasado guay”. Y es que a veces las cosas o las palabras más simples son las mejor nos definen.

DÍA 2

Amanece el día dos de nuestro camino solidario y empieza el goteo de peregrinos AXA de Todo Corazón al desayuno del hotel. Juan y Nati, voluntarios AXA, no han dormido muy bien por los “pequeños” ronquidos de sus acompañantes... y eso que el día anterior, según los rumores, se veía venir.

A primera hora les regalamos a todos los beneficiarios una camiseta y una gorra de AXA de Todo Corazón que reciben con grandes sonrisas, y salimos hacia Hospital de Órbigo, un pueblo espectacular, para hacer nuestros próximos 6 kilómetros. Ya nos empezamos a conocer todos más y empezamos a vislumbrar las debilidades de nuestros compañeros. Sol, beneficiaria de Ademo, se abraza todo el rato a sus nuevos amigos José y Jon (de AXA).

Pero quienes se llevan la palma son Lola y Laura (voluntarias AXA) que tratan espectacularmente y con una gran paciencia a Sonia, beneficiaria de FDI, que gracias a ellas no coge el coche escoba en ningún momento, y todo porque han descubierto el truco infalible: comprarle lo que a ella verdaderamente le apasiona, ¡la revista de los ponys!

Y los momentos especiales se suceden: Ana, voluntaria de AXA, confiesa que lo que más le ha emocionado es que el día anterior, al apagar las luces de la habitación para dormir, María Eugenia (beneficiaria de Ademo) le ha dicho: “Te quiero mucho”.

Llegamos a Astorga a comer; sol de justicia y comida en grupo al fresco. Después damos una vuelta para ver Astorga, y tras 2 kilómetros más llegamos a Castrillo de los Polvazares. ¡Un pueblo maravilloso!

Y vuelta a abrazarnos en grupo… le empiezo a coger el gusto, y eso que, como buena bilbaína, soy del grupo de los grandes tímidos. Cada cual tiene su historia, algunas muy duras, fruto de la incomprensión de ser diferentes, pero el futuro lo afrontan con un positivismo impresionante. Es especialmente digno de ver el respeto que se tienen unos a otros pese a lo diferentes que son, incluso entre ellos.

DÍA 3

Suena el despertador, ¡son las 7 de la mañana! Ducha rápida, desayuno y en marcha. El ambiente somnoliento se mezcla con los primeros guiños de complicidad. Ángel (de Ademo), pide discoteca hasta la 1 am desde primera hora del día, aunque Saray (monitora de Ademo) duda que haya ido alguna vez a una (se va a llevar una desilusión).

Hoy es un día especial ya que se unen nuevos amigos a nuestra pequeña aventura: la asociación “Rodando”, que reúne a personas con discapacidad física e intelectual y recorre con ellos los caminos de Galicia con bicicletas adaptadas; y un grupo de voluntarios de AXA de Todo Corazón de Vigo.

Nos reunimos en la ruta O Pino y nos enfrentamos al día más largo de recorrido. Durante la mañana se van mezclando poco a poco todos los voluntarios y acompañantes, un desmadre maravilloso de risas y unión y un escenario natural de ensueño que cala en todos nosotros.

“Rodando” regala a Sonia (de Ademo) un casco rosa (qué lástima que no lleve un pony o un unicornio serigrafiado), y sin duda es para ella el día más feliz del camino.

Pero, sin duda, lo más especial que vivimos en esta etapa es darnos cuenta de hasta qué punto vivimos con normalidad la interacción con beneficiarios y voluntarios. Algo que se pone de manifiesto cuando la gente que nos ve pasar nos dice “¡sois unos campeones por acudir con personas con discapacidad!”, pero nosotros ni siquiera nos damos cuenta al principio de a qué se refieren, en nuestro “micromundo” de unión no advertimos diferencias, ¡todos somos iguales! Y es que sin darnos cuenta ya hemos formado nuestra propia familia.

Tras una comida campera al aire libre continuamos andando hacia O Monte do Gozo. Vistas increíbles amenizadas con los ensayos del concierto de Alejandro Sanz mientras hacemos juegos. Afloran emociones intensas por parte de todos al reflexionar sobre lo que ha significado el camino para nosotros.

Tras ducharnos y cenar, nos animamos a salir a la puerta del albergue en el que dormimos a escuchar el concierto de Alejandro Sanz. Nos acercamos a unas vallas recubiertas con unas mallas que impiden verlo. Entonces Pilar, la madre de Manuel (de la asociación Rodando) le pide al personal de seguridad que nos deje quitar un poco la malla para poder ver el concierto. Finalmente, el vigilante se enternece y nos quita una pequeña parte.

La noche se llena de magia; Joaquín, Sonia, Cristina y Ángel no paran de bailar, y por fin llega la canción favorita de Pilar y Manuel, “Mi persona favorita”, que cantamos todos en grupo. Y es que, sin quererlo, ellos van a pertenecer a nuestro grupo de personas favoritas ya para siempre.

DÍA 4

Llega ya el último día de esta bonita experiencia, y es que todo lo bueno llega a su fin. Todavía con la “resaca” de la magia de la noche anterior, nos echamos al camino para conseguir nuestro objetivo del viaje: llegar a la Catedral de Santiago. Pero, si bien todos lo intuimos pero no lo decimos, ya hemos conseguido nuestro verdadero objetivo: descubrir que todos y cada uno de conservaremos este recuerdo como uno de los más emotivos de nuestras vidas, recordando para siempre la esencia de las personas: su corazón y las ganas de vivir.

La llegada al a plaza del Obradoiro trae un nuevo abrazo en grupo. Unos a la misa de peregrinos, otros a comprar souvenirs (a Javier se le iluminan los ojos cuando nos cuenta a José, a Carolina (de AXA) y a mí lo que ha comprado a su familia y las ganas que tiene de ver a sus sobrinas. A Carolina (AXA), Vanesa la compra un osito rosa que la hace emocionarse. Otros como Cristina (de Ademo) cambia de opinión en 2 minutos sobre si quiere quedarse, si quiere irse, si le gusta alguien o no. Gabriela (de AXA) ya la aceptado tal y como es y está encantada con la experiencia. José (también de AXA) sigue conversando con Rodrigo (de Ademo) sobre si le gustan las grúas, sobre si el butafumeiro se puede comprar solo en Santiago o en otras ciudades… y vuelta a empezar. Nos dice que ha aprendido palabras nuevas como “impactante” o “in fraganti” que le ha enseñado Gema.

Ya nos vamos al bus. Despedidas y carreras y ya podemos descansar y seguir compartiendo en el bus nuestros mejores momentos mientras Ángel (de Ademo) levanta los dedos cada dos segundos en señal de victoria, al cual ya todos replicamos con una sonrisa dibujada en nuestras caras.

A TODOS LOS VOLUNTARIOS DE MADRID, BARCELONA, VIGO, FDI, ADEMO Y RODANDO MIL MILLONES DE GRACIAS POR HACER ESTOS DÍAS POSIBLE! ¡OS LLEVAMOS EN NUESTROS CORAZONES!

Y a ti que estás leyendo estas líneas y aún no estás apuntado .. ¿A qué esperas? ¡Únete a nuestra ola solidaria!

¡NOS VEMOS EN LOS VOLUNTARIADOS!

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