Sí, ya sabemos que la edad está en la mente y que hay personas de 60 años más dispuestas a correr riesgos que un veinteañero tras escuchar “¿a que no te atreves a…?”. Pero también es cierto que no es lo mismo invertir para la primera vivienda que para la jubilación así que, teniendo en cuenta esas dos premisas vamos a intentar dar una pequeña guía de las mejores inversiones según la edad. Y si sientes que tienes 20 años menos de lo que dice tu DNI, siempre puedes adaptarla.

Para empezar existe una regla que, aunque muchos expertos consideran que no es exacta, puede dar una idea genérica, siempre adecuándola al riesgo que queramos asumir y al contexto económico. Esta regla del 120 consiste en restar a ese 120 nuestra edad y el número que obtengamos será el porcentaje de nuestra cartera de inversión que deberíamos dedicar a renta variable, es decir, a aquella con mayor riesgo y mayor rentabilidad. Así, a menor edad, más riesgo; algo en lo que sí se ponen de acuerdo los expertos. Teniendo en cuenta esto, ¿cómo invertir según la edad que tengamos?

- Si estamos entre los 25 y los 35 años: Los expertos recomiendan que los mayores riesgos los llevemos a cabo en la juventud y eso, económicamente hablando, se traduce en renta variable, con mayor rentabilidad a largo plazo. Eso significa invertir en bolsa así como en fondo o planes de pensiones de renta variable además de, claro está, invertir en el mercado inmobiliario y comprar una casa.

-Si estamos entre los 35 y los 45 años: Aquí empieza lo que en la gestora global Schroders llaman el ecuador de la vida, cuando los objetivos financieros son más claros y se tienen otras obligaciones como una hipoteca y gastos familiares, por lo que conviene reducir el riesgo e ir balanceándolo. Eso se traduce en reducir el número de acciones e incrementar el de bonos. Además es fundamental que incrementemos las aportaciones al plan de pensiones.

- Si estamos entre los 45 y los 55 años: Un poco antes de la jubilación la preocupación debería ser maximizar las rentas y hacer cuentas para calibrar cuándo jubilarse y qué renta tendremos cuando llegue ese momento. Aunque hay que tener en cuenta que eso no significa aumentar el nivel de riesgo de nuestras inversiones ya que el tiempo que tendríamos para recuperarnos de una mala inversión antes de la jubilación es escaso.

- Si estamos entre los 55 y los 65 años: Nos encontramos en la recta final antes de la jubilación por lo que el riesgo ha de ser aún menor. En este momento es fundamental tener un cálculo lo más aproximado posible de si lo que tenemos ahorrado nos permitirá llevar el nivel de vida que queremos cuando nos jubilemos; si tenemos suficiente el riesgo que asumamos en nuestras inversiones puede ser mayor.

- Si ya hemos sobrepasado los 65 años: En este momento la preocupación debe ser asegurarnos de que tendremos los suficientes ahorros para mantener el nivel de vida que deseemos. Hay quienes optan por ir liquidando las inversiones de forma gradual para complementar los ahorros o para dedicarlo a nuestros seres queridos, al tiempo que se invierte en títulos de bajo riesgo con rentas periódicas.

Sabemos que la edad no es más que un número que puede representarnos tanto como nosotros queramos así que si quieres ahorrar de la mano de un experto, consulta los planes de AXA e invierte ya en crear tu bienestar futuro.

Para estar al día sobre este tipo de consejos sigue nuesta Página de Facebook o nuestra cuenta en Twitter @AXASegurosES